La sección temática, coordinada e introducida por María Castañeda y Miguel Ángel Ruz, aborda los mapas novohispanos de Oaxaca y del Altiplano Central de una manera novedosa. Más allá de la toponimia y la iconografía, es verdaderamente una antropología desde los archivos y códices, un tipo de investigación ubicado en la convergencia de la historia, la arqueología (del paisaje), la antropología, la ecología y la geografía, con objetivos académicos a la vez que de extensión hacia las comunidades, quienes en estos lienzos y títulos tienen las raíces de su identidad. Recuperan así, con herramientas y tecnologías modernas, una vieja tradición de investigación cartográfica mexicana, que se remonta a Alfonso Caso, y se podría decir que hasta Francisco Javier Clavijero.En la sección miscelánea hay tres trabajos sobre sujetos aparentemente muy variados pero que comparten un tema central: la ideología como factor de cohesión y control social.El primero, de antropología social, analiza la tensión y los puentes de comunicación (por medio de la “acomodación”) entre prácticas rituales ancestrales y católicas en un pueblo de Yucatán en México.El segundo, deriva de la evidencia arqueológica y arquitectónica en la costa norte de Perú, los sistemas de control social y religioso sobre los recursos almacenados en la capital chimú y su colapso con la conquista inca. El tercero y último hace una relectura de los glifos de cómputo del tiempo en el sitio de Xochicalco, ligando el desarrollo de los calendarios solar y ritual con estrategias políticas de impacto pan-mesoamericano.